El jueves tuvimos el Pleno del Ayuntamiento de Barakaldo. Los primeros puntos del orden del día se centraron en el modelo de gestión de este Ayuntamiento. Hablamos de los reparos de los técnicos municipales por la forma en que se contrata en este ayuntamiento, de discrepancias en la interpretación de los procedimiento, de retraso en las contratación (prórrogas improcedentes de contratos), de expedientes en los que entran y salen papeles “Como Pedro por su casa”, de errores en las formas de convocar las comisiones por las prisas de última hora, a pesar de conocer los compromisos con más de un mes de antelación.
Lo curioso de todo esto, es que desde el partido socialista, esta forma de gestionar un Ayuntamiento les parece lo más normal. Tienen tan asumido el modelo de gestión socialista, el modelo del caos, que hasta les parece ridículo que desde fuera, no podamos más que denunciarlo y pidan asumir como correcto lo inaceptable. Lo habitual es lo normal, pero no tiene por qué ser lo correcto. El modelo del caos, el modelo de gestión socialista es el habitual, pero no es el correcto.
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