Barakaldo sufrió el pasado año el robo de 15,4 kilómetros de cable
Barakaldo sufrió el pasado año el robo de más de 15.400 metros de cable eléctrico en sus calles. El Ayuntamiento ha contabilizado 25 actuaciones de este tipo en el último año, lo que ha supuesto un coste económico superior a los 32.000 euros y más de 153 horas de trabajo de las brigadas eléctricas municipales.
El robo de cable es uno de los mayores quebraderos de cabeza para los Ayuntamientos, ya que, a pesar de los intentos por dar con una medida efectiva que evite estos hurtos, no se ha encontrado la fórmula perfecta. Las calles de Barakaldo sufrieron el pasado año la sustracción de 15,4 kilómetros de cableado, lo que derivó en numerosos problemas eléctricos, dejando sin luz numerosas zonas de la ciudad.
Los espacios favoritos por los ladrones para llevara a cabo estos hurtos se encuentran en los lugares más alejados del centro. Así, se ha sustraído cable en el parque de La Orconera, el parque Serralta, Santa Agueda, Peñaskuren, Basatxu, Galindo, en la calle Ibaibe o el parque Clara Campoamor, entre otros.
Entre las actuaciones más importantes llevadas a cabo destacan el robo en el jardín botánico, donde arrancaron 2.450 metros de cable o la calle Ibaibe, con 1.800 metros sustraídos.
La reposición del cableado se ha llevado a cabo a través de las brigadas municipales, excepto en los casos de mayor envergadura, en los que ha sido necesario realizar contratos de obra menor para subsanar la falta de cable. Estas operaciones de reposición han supuesto un coste de 32.395,54 euros y más de 150 horas de trabajo de las brigadas eléctricas municipales.
“Gran parte de las quejas e incidencias que recibimos en el Ayuntamiento hacen referencia al alumbrado público. Una de las principales causas de estos problemas eléctricos se ha derivado de los robos de cable, que en ocasiones han sido tan grandes que ha llevado mayor tiempo el arreglo”, ha destacado Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo. “A la dificultad de reponer todo el cable robado se le une además que hemos encontrado zonas en las que se había robado cable con anterioridad pero este no se había repuesto. Es el caso del parque de Tellaetxe, el parque de La Orconera o la ribera del río Galindo, en la zona de Megapark”, ha indicado Del Campo.
NUEVAS MEDIDAS ANTIROBO
El Ayuntamiento probó en 2013 su primera medida contra los robos de cable, en el nuevo paseo hacia El Regato. En la zona se instaló un sistema que alarmaba en caso de que se intentase realizar un robo. “Pero según nos han indicado los técnicos, este sistema era excesivamente caro, cerca de 30.000 euros, y no tenía garantías de éxito, sin ir más lejos dos días después del estreno se acometió un hurto. Además, producía mucha alarma falsa, por lo que los técnicos desaconsejaron su utilización en otras zonas”, ha explicado la alcaldesa.
Antes de ese momento, no se ha utilizado ningún sistema, salvo la vigilancia de la Policía Local en las zonas más susceptibles de robo. El nuevo equipo de gobierno, ante el problema constatado del robo de cableado, se encuentra muy sensible en torno a las propuestas que plantean tanto los técnicos como las distintas empresas que trabajan en este ámbito, por ese motivo ha comenzado a investigar sobre la mejor solución para que los ladrones al menos no lo tengan tan fácil a la hora de realizar los hurtos.
En este sentido, los técnicos del Área de Servicios Municipales han encontrado un sistema sencillo que ha comenzado a utilizarse en cada recambio de cableado: llenar las alcantarillas con gravilla; “una técnica que aumenta el tiempo que necesitan para sustraer el cableado, ya que para llegar a él deben vaciar las arquetas”, ha aclarado Del Campo.
En las próximas semanas se va adjudicar una reforma completa del cableado en la plaza de la Orconera, una de las zonas en la que no se habia repuesto el cable robado y donde el sistema eléctrico se encuentra obsoleto. Esta obra, en la que se colocarán 60 farolas nuevas, con luminarias de tecnología led, contará en sus arquetas con esta técnica de rellenado de gravilla. El precio de esta reforma eléctrica tiene un coste de 105.000 euros. Los trabajos podrían estar finalizados para el segundo trimestre del año.
MEJORA DE LA ILUMINACIÓN EN PORMETXETA
Por otro lado, la obra de mejora del alumbrado en la Plaza Pormetxeta comenzó ayer mismo. Esta es una de las obras más importantes planteadas en la zona, no tanto por su coste, que asciende a 52.000 euros, como por la mejora que va a suponer para los y las vecinas de la zona en cuanto a seguridad. “EAJ-PNV siempre ha considerado que la Plaza Pormetxeta era uno de los puntos negros de la ciudad. La Mesa de Puntos Negros nos ha dado la razón, ya que las asociaciones de mujeres que en ella participan coinciden con nosotros. Con la mejora de la iluminación esperamos que esa sensación de inseguridad mejore”, ha explicado la alcaldesa.
La obra, que estará lista en febrero, consiste en la instalación de 52 puntos de luz led sustentados en nueve columnas que se repartirán por la plaza.
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